La bioquímica Luisina Riera precisó que la gente “requiere tanto PCR como las pruebas rápidas. El promedio diario está entre 40 y 50 personas. Aumentó la concurrencia y también el porcentaje de positivos, que alcanza a casi un tercio de total”.
La profesional aclaró que todas las pruebas son registradas en el sistema nacional “porque estamos en pandemia y esto se debe registrar de manera obligatoria”.
Sobre los test que se venderán en farmacias, Riera expresó que “no podemos decir que son malos, sino todo lo contrario. La realidad es que hay que saber utilizarlos; el momento de la toma de muestra y quien lo hará, además de la interpretación del resultado y la conducta que se tomará después” son cuestiones centrales. Enseguida enfatizó que “a la toma de muestra la tiene que hacer personal calificado. Nosotros fuimos capacitados, porque no es un hisopado nasal simple. Del mismo modo es fundamental en qué momento se realiza el test, porque puede darnos un negativo por hacerlo muy pronto. Hay que considerar esto. Es conveniente que al resultado lo lea un médico, porque cualquiera que está a nuestro alrededor puede verse afectado nuestras conductas. Además, si esta persona no lo registra, podría afectar los registros y las decisiones que se tomen para manejar la pandemia”.
