
Miriam, denunciante contó que en el momento del hecho “estabas adentro de mi casa, porque justo había vuelto del supermercado y escuché un tiro, y enseguida oí a una de mis perras que venía llorando y rengueando. Un vecino le tiró con el aire comprimido”.

Sobre el estado de salud del can, la mujer dijo que “está dolorida y tiembla del miedo. El veterinario me tiene que recetar antibióticos. El impacto fue en la mano derecha”.

“No quiero que la denuncia quede en la nada porque es un perro, pero mañana puede ser una criatura”, finalizó.