"En la familia nos cuidamos mucho porque tenemos pacientes con enfermedades de base y son pacientes de riesgo. Además, tenemos la necesidad de salir a trabajar", relató Ríos y se refirió a la prevención: "no compartimos el mate, ni cubiertos o platos y tampoco la mesa. Además, cada uno que entra a la casa, se higieniza. Las medidas que tomábamos, siempre fueron las adecuadas para tratar de evitar el contagio", explicó.
El contagio y el aislamiento
Mariana Ríos dijo que su hijo, que es personal de salud, contrajo el virus y a raíz de ello, todos los integrantes de la familia se aislaron. "Fue una situación muy dura, pero gracias a Dios y el apoyo de mucha gente, pudimos pasar el aislamiento y la enfermedad", remarcó."Ya estamos todos recuperados, algunos integrantes de la familia tuvieron síntomas severos; otros como mi nieto y yo que tuvimos síntomas leves y otros integrantes que no tuvieron o no se contagiaron", relató a Lt14 y agregó que se trata de una enfermedad "a la cual hay que tenerle mucho respeto y mucho cuidado, esto no es una joda, no es una mentira. Esto, no es una gripe más. No es una cuestión leve, es una cosa seria", remarcó.
Servicio del comedor
En la casa de Mariana Ríos funciona el comedor comunitario de barrio Puerto Sánchez, pero también algunos pescadores, trabajan en el lugar. Por lo cual, se generó incertidumbre con el servicio del comedor comunitario, pero la solidaridad y la organización comunitaria, impulsaron la solución."Las personas no podían pasar dos semanas sin la vianda o la copa de leche. Así que los vecinos que vienen a ayudar, se pusieron de acuerdo y se organizaron. Llevaron todas las cosas a la casa de otro vecino, para poder brindar el servicio a la comunidad", relató Ríos.
Solidarios y cuidarse
"Es muy importante ser solidarios en la enfermedad, porque el que está enfermo, necesita de la ayuda del otro y no que lo estén discriminando o acusando", reflexionó Mariana Ríos y agregó que "muchos se enferman sin querer, algunos se lo buscan, pero en nuestro caso, fue algo inesperado porque nos cuidábamos un montón", remarcó."Es fundamental cuidarse y mantener el distanciamiento. No hay que bajar los brazos porque en cualquier momento, nos puede tocar", concluyó la referente de barrio Puerto Sánchez.