"La fe mueve, y anoche, en nada impidió la falta de colectivos, porque la parroquia estaba llena", rememoró Vázquez en relación a la primera misa que se celebró a las 00.
"Fue una noche inolvidable, llena de bendiciones", destacó, al tiempo que acotó: "Vimos muchas mujeres muy tristes, que lloraban, otras que agradecieron y otras a las que les falta el trabajo".
"Se les brinda la contención necesaria que solo Dios puede dar, y San Cayetano", valoró la servidora, que desde hace siete años que desempeña esta tarea.
En la oportunidad, comentó que se acercó a la parroquia en agradecimiento y "por amor al prójimo".
"Bajo la unidad y el amor de Jesús, disfrutamos del modo sirviendo, bajo el amor y la protección de Jesús", insistió.
