"Estamos felices y muy contentos", confesó Leonardo, al tiempo que comentó: "Vivimos todo esto con muchas ganas y ansiedad por irnos a casa".
"Este jueves nos dan el alta tan esperada porque por suerte están bien", completó la mamá. Fue en ese sentido que recordó: "Fueron dos meses, que si bien fueron pasaron rápido, fueron bastante intensos". Ella es Victoria. Los papás tardaron en congeniar los nombres.-
"Estuvieron mucho tiempo en la Neo porque son muy chiquitos, pasaron unas cositas feas -rememoró- pero hubo que pasarlas y darles tiempo".
"Gabriel estuvo bastante grave, con complicaciones feas y las pasamos como cualquiera que es padre y tiene a su hijito grave: lloras de tristeza porque uno se complica, lloras de alegría porque otro mejora, y asi.. es difícil, pero cuando pasa, es el día a día", explicó la mamá. Magali, la más inquieta.-
Se recordará que los pequeños nacieron por cesárea con 32 semanas de gestación y un peso de alrededor de 1.300 kg.
"Ahora, por suerte, están bien", valoró la mamá. "Es el día. Hoy están de una forma y mañana no se sabe, hoy tienen una complicación, mañana se soluciona y vuelve a aparecer otra que se vuelve a solucionar", comentó al respecto.
"Nos están esperando con muchas ganas"
En la oportunidad, el papá comentó cómo vivió la familia la espera de los cuatrillizos: "Fue una revolución en las dos familias, y ahora están muy felices porque vivieron toda nuestra búsqueda. Nos están esperando con muchas ganas". Benjamín. A los seis meses de gestación acordaron los nombres.- "Fue mucho el tiempo que estuvimos lejos de casa, así que si ya con ganas de volver. Hace una semana y media que nos pasaron a una habitación", completó su esposa.Es que la pareja tenía más de dos años en la búsqueda de ser padres; luego de varios intentos y expectativas frustradas, encararon el tratamiento que les permitiera concretar el postergado anhelo en un Centro de Reproducción Asistida de Paraná. Gabriel. Fue el que más complicado estuvo durante la internación.- Finalmente, y al confirmar que "cierran la fábrica", los papás primerizos contaron sobre los malabares que hacer para alimentar a los cuatro.
"Nos adaptamos a darles la medicación con la que se van de alta, a darles la leche con el tiempo.. Por ahora vamos bien.. solo lloran cuando tienen hambre, se van despertando de a uno y cuando están todos despiertos, arrancamos..", detalló Rocío.
"Estamos felices, esto es lo que esperábamos desde el principio, que estén bien y poder ir a casa", cerró. (Elonce)