Este 17 de abril, Miércoles Santo, y en el pórtico del Triduo Pascual, la Iglesia -como acto central de la jornada- conmemora la Santa Misa Crismal.
En la misa crismal se renuevan las promesas sacerdotales y se hace la bendición de los óleos sagrados que al término de la misa los párrocos recogen para llevar a las parroquias y que se usarán en la administración de los sacramentos del Bautismo, Confirmación y la unción de los enfermos.
La concelebración eucarística fue presidida por Monseñor Juan Alberto Puiggari. A la celebración están invitados en este día, de un modo particular, los presbíteros de la diócesis. "Es una misa muy linda porque nos sumerge en el misterio de la eucaristía, en el misterio de la entrega de Jesús por nosotros", aseguró a Elonce TV, monseñor Juan Alberto Puiggari.
En el mismo sentido, invitó a la comunidad "a no dejar pasar estos días de gracia. El Señor quiere renovar todas las cosas. Tratemos de acercarnos al misterio de la cruz, de la muerte y la resurrección de Jesús. Son días de gracia, tengo la certeza de que a todos el Señor nos tiene reservado algo especial, por eso invito a los creyentes a acompañar a Jesús en estos días".
¿Qué es la Misa Crismal?
La Misa Crismal, que el obispo celebra con su presbiterio, y dentro de la cual consagra el Santo Crisma (la palabra crisma proviene del latín chrisma, que significa unción) y bendice los demás óleos, "es una profunda manifestación de comunión de los presbíteros con el propio obispo", se deja en claro desde la iglesia.Para esta misa "se reúnen y concelebran en ella los presbíteros, puesto que en la confección del crisma son testigos y cooperadores del obispo, de cuya sagrada función participan, para la construcción del pueblo de Dios, su santificación y su conducción: así se manifiesta claramente la unidad del sacerdocio y del sacrificio de Cristo, que se perpetúa en la Iglesia", detalla la liturgia. Elonce.com.