Los profesionales que la atendieron señalaron a este medio que la pequeña se encuentra en una sala común, al tiempo que manifestaron que ha respondido bien al tratamiento, por lo que prontamente podría recibir el alta.
El can pertenecería a un vecino de la vivienda de los abuelos, donde se encontraba la nena en calle Díaz de Vivar. Aparentemente, el animal se encontraba en la calle cuando se produjo el hecho. Más allá del temor que el hecho generó en principio y de las cadenas de oraciones que se realizaron, no le quedarían secuelas de mayor gravedad. Elonce.com