Paraná Felicidad que perdura

Amor para toda la vida: Miguel y Virginia cumplieron 59 años de casados

Relataron a Elonce TV cómo se conocieron y con sabias palabras resaltaron cuál es la receta para mantener vivo el amor. A los jóvenes que deciden contraer matrimonio se aconsejaron que "se respeten, sin ofensas ni gritos"
"Nos casamos el 6 de septiembre de 1958 en la Catedral de Paraná. Me casé con mi hermoso vestido blanco", recordó Virginia tomada de la mano de Miguel, el amor de toda su vida.

"Hoy es el primer día que no toma mate en la cama", comentó él durante el programa El Despertador de Elonce TV al dar cuenta de que ya es tradición que se levanta temprano, alrededor de las 6 y prepara el mate. "Después me acuesto otro rato", expresó.

Después de reconocer que el mate en la cama es uno de los secretos para mantener vivo el amor, ella comentó que "estuvimos de novios un año. Luego nos comprometimos y al pasar otro año nos casamos. Nos fuimos a vivir a Concepción del Uruguay. Ahí estuvimos 30 años. Por razones de salud de él nos vinimos acá".

Consultados sobre cómo se conocieron, Miguel relató que fue "trabajando en una fábrica ubicada en Racedo y 9 de Julio. Era un frigorífico. Al realizar la selección de personal llamaron a 15 varones y otras tantas mujeres, pero sólo había dos puestos. Y quedamos nosotros". "Vivíamos en el mismo barrio pero no nos conocíamos", acotó ella.

"Habremos trabajado más o menos dos años juntos, porque después me tocó el Servicio Militar", dijo Miguel, que enseguida acotó con picardía que después se fue a Concepción del Uruguay, donde "tenía varias candidatas, pero mi corazón estaba acá".

Virginia aseguró que él insistía con el casamiento, así que a los 9 meses que estuvo en La Histórica decidieron contraer matrimonio. "Yo me quiero casar, me quiero casar, me decía siempre", expresó. Puso de relieve que "más allá de los problemitas que pasamos todos, hemos salido al frente".
El respeto ante todo

"Yo le decía a él cuando recién nos casamos que lo primero era respetarnos uno al otro. Ni un grito, una ofensa ni nada. Después si a mi no me gustaba algo me callaba y llegado el momento recién hablaba. Tampoco gritaba. Él hacía igual. Ahora no sé qué voy a hacer si me falta él", expresó Virginia.

Y Miguel añadió: "Para mantener el vínculo, la consigna era decir "sí querida" y hasta ahora sigo diciendo "sí querida"".

Además, recalcó que "el eje principal del matrimonio es la mujer. Nosotros hacemos cosas que nos corresponden, pero la mujer es el sostén del matrimonio y la vida".

"Todo lo que vamos a hacer lo conversamos primero. Pero la intuición de hacer las cosas de la manera correcta la tiene la mujer", insistió.

Virginia consideró que de grandes el amor si vive "más unidos. El amor nunca se terminó, sino que se alimenta siempre", definió.
Mensaje
El mensaje para los jóvenes que se casan "es que de entrada se respeten, sin ofensas ni gritos. Si algo no gusta del otro hay que buscar el momento justo para hablarlo".

Los primeros amoríos
"La elegí porque era bonita y sigue siéndolo. Nos cuidamos mutuamente. Venimos de la época en que nos casábamos para siempre. Hay que seguir lo que a uno le dicen en el Registro Civil y en la Iglesia", señaló Miguel.

Finalmente, contó que "la primera cita y amoríos fueron en la misma fábrica, pero en aquella época no había tanto transporte, así que muchas veces íbamos a la Plaza Sáenz Peña, de donde tenemos grandes recuerdos. Ahí no nos veía nadie y podíamos charlar". Elonce.com
El comentario no será publicado ya que no encuadra dentro de las normas de participación de publicación preestablecidas.

NOTICIAS DESTACADAS