La propuesta generó polémica entre activistas por los derechos de las mujeres, e incluso en instancias del propio gobierno mexicano que abordan esta problemática.
"Ese delito teníamos que hacerlo más sencillo para proteger a las víctimas, darles mayor empoderamiento a la defensa de su vulnerabilidad", dijo el fiscal Alejandro Gertz durante la conferencia matutina del presidente Andrés Manuel López Obrador, de izquierda.
El fiscal explicó que su propuesta obedece a que los femicidios aumentaron 137% durante los últimos cinco años en México, en comparación con el incremento del 35% de los homicidios, según un análisis elaborado por la propia fiscalía.
Según Gertz, las cifras muestran la necesidad de modificar la ley para perseguir de forma "más eficaz" los asesinatos contra mujeres.
"El delito no está, de acuerdo con nuestro punto de vista, lo suficientemente claro como para poder hacer esa defensa. En los homicidios no tenemos ese aumento y en los femicidios sí. Todo es de lógica elemental", señaló.
Los críticos expresaron su temor de que el femicidio sea retirado del Código Penal y advirtieron que la solución a la escasa condena de esos delitos es capacitar mejor a los servidores públicos encargados de investigarlo.
De acuerdo a la ley mexicana, hay un femicidio si existió: violencia sexual previa al asesinato, lesiones físicas previas, antecedentes de violencia doméstica, relación sentimental con el agresor, amenazas u hostigamiento previo, privación de la comunicación y exposición pública del cuerpo de la víctima.
El gubernamental Instituto Nacional de las Mujeres (Inmujeres) señaló la semana pasada que la medida "significaría un retroceso en materia de procuración e impartición de justicia para las mujeres y las niñas".
Mientras que la Comisión Nacional para Prevenir y Erradicar la Violencia Contra las Mujeres (CONAVIM) insistió en que el femicidio "debe continuar en la ley" y que las autoridades de justicia "seguirán obligadas a investigarlo y sancionarlo".
Gertz adelantó que la iniciativa de reforma será retomada el martes durante un encuentro con diputados para discutir una posible reforma judicial.
Durante 2019, 1.006 mujeres fueron asesinadas en México, según datos del Secretariado Ejecutivo del Sistema Nacional de Seguridad Pública (SNSP).
Sin embargo, las limitaciones para tipificarlo, parte central de la polémica según el gobierno, hacen posible que esta cifra sea mayor, según expertos.
