Clauvino da Silva, conocido como "Bajito", intentó huir por la puerta principal de la penitenciaría de Gericinó, luego de una visita de su hija. Lo hizo vestido con la ropa de la chica, una peluca y una máscara de látex. Los guardias del penal advirtieron que algo extraño sucedía y descubrieron la maniobra del delincuente. Tras la frustrada tentativa de escape, el preso fue trasladado a una unidad de máxima seguridad y se le aplicaron sanciones disciplinarias.
La hija de da Silva y otros siete visitantes están bajo la mira de la policía. Se los investigará por la sospecha de haber colaborado en el intento de fuga.
De acuerdo con las autoridades, Da Silva forma parte de la cúpula del Comando Vermelho, uno de los grupos criminales más poderosos de Brasil, que controla buena parte del tráfico de drogas en Río de Janeiro. Según las autoridades, el intento de fuga fue un "acto de desesperación" debido a que en lo que va del año, inspectores penitenciarios de Río han secuestrado más de siete mil teléfonos celulares, joyas y dinero dentro de las celdas.