Pasaron ocho horas y Juan regresó. La sorpresa fue terrible: los pequeños yacían si vida, deshidratados y dejados a su triste destino bajo el sofocante calor.
De pronto, la NYPD recibió una llamada de una persona que escuchó los gritos del padre en plena carretera. Cuando los policías llegaron al lugar donde se encontraba el auto, corroboraron la muerte de los chicos.
"Es impactante", comentó a New York Post un vecino que dijo llamarse Leonard P., de 27 años, mientras pasaba por el lugar. "Sé que hay dos angelitos en el cielo esta noche. Espero que tengan un hermoso entierro. Pero, ¿el papá? Ciérrenle el cul?", protestó.
El padre de Phoenix y Maritza quedó detenido. Está acusado de dos cargos de homicidio y dos cargos de homicidio por negligencia criminal.
La pareja, además, tiene un tercer hijo, de 3 años, a quien el hombre dejó en Yonkers, una ciudad ubicada en el condado de Westchester en el estado de Nueva York el mismo viernes más temprano.