Sin embargo, los fiscales de París creen que el incendio en la catedral se inició pura y exclusivamente por accidente, según la investigación preliminar.
El incendio fue detectado a las 18.50 de Francia, las 13.50 de la Argentina. Más de tres horas después, aún no había sido controlado.
Según los primeros datos, las llamas se iniciaron en la parte del techo de la catedral que estaba siendo sometida a una restauración.
La principal hipótesis hasta ahora es que se trató de un accidente. La investigación fue abierta bajo la carátula de "destrucción involuntaria por el incendio".
El fuego afectó en un principio a toda el área ubicada alrededor de la famosa aguja central agregada en el siglo XIX al templo medieval, que terminó cayendo como consecuencia de las llamas. Después las llamas se propagaron por otros sectores.
Los bomberos tuvieron dificultades para acceder a la catedral, lo que hizo que el incendio se extendiera por todo el armazón que sujeta el techo.
"Cuando llegaron los bomberos ya había muchas llamas que salían del techo. Vimos mucho humo, pensábamos que era por las obras que están haciendo", contó Kaissia Rouan, que se encontraba en el parque adyacente a la catedral.
Unos 400 bomberos trabajaron en el lugar. Controlar el fuego les llevó unas cinco horas.
Luego de que el Gobierno advirtiera sobre la posibilidad de que la construcción colapsara por las llamas, voceros de los bomberos aseguraron que "la estructura de la catedral está a salvo y preservada en su totalidad".
Apenas empezó el incendio evacuaron a toda la gente que estaba en la zona de la catedral, incluyendo la de viviendas cercanas, para evitar que los afectara el humo.
