Según la investigación policial, el siniestro se desencadenó cuando una mujer de 48 años empezó a discutir con el chófer por no haberse detenido en una de las paradas y comenzó a agredrirlo, lo que le hizo perder el control del vehículo.Como consecuencia, el autobús invadió el carril contrario de la vía y chocó con un automóvil que circulaba en dirección opuesta, tras lo cual rompió la cerca del puente y cayó al río.La investigación estableció que el día del accidente el autobús hizo un cambio en su ruta y por eso no se detuvo en la parada que necesitaba la mujer. Otros pasajeros que viajaron esa fecha en el bus afirmaron que el conductor había anunciado sobre ese cambio a través de los altavoces.
Pese a esto, la pasajera inició una disputa con el conductor, quien se negó a detenerse porque no había paradas cerca. El hombre trató de explicárselo, pero pronto la conversación desembocó en un intercambio de insultos y golpes. En el momento cuando perdió el control del vehículo, este circulaba a una velocidad de 51 kilómetros por hora.