"Cuando bautizamos a un niño, en ese niño entra el Espíritu Santo y el Espíritu Santo hace que crezcan en ese niño, desde pequeño, virtudes cristianas que florecerán después", explicó Francisco este miércoles.
El Papa ha respondido así a la propuesta que se plantean muchos padres: "¿Por qué bautizar a un niño que no entiende? Esperemos a que crezca, a que entienda y sea él mismo el que pida el bautismo".
"Hay un antes y un después del bautismo", señaló el Sumo Pontífice en la Audiencia General dedicada al sacramento del Bautismo, resaltó la agencia Zenit.org. El Papa animó a los padres: "Siempre hay que dar a todos esta oportunidad, a todos los niños, la de tener dentro al Espíritu Santo que los guíe durante la vida. ¡No se olviden de bautizar a los niños!".
El Santo Padre indicó que el sacramento del Bautismo es un don gratuito para todos, adultos y recién nacidos.
Explicó que "como sucede con una semilla llena de vida", este regalo arraiga y da fruto en una tierra alimentada por la fe.
"El bautismo nos cristifica, quien ha recibido el bautismo y es cristificado, se asemeja a Cristo, se transforma en Cristo y se hace de verdad otro Cristo", dijo también.