"David y Louise Turpin declaran su inocencia en todos los cargos del caso de tortura de Perris", informó la oficina de Mike Hestrin, fiscal de distrito del condado de Riverside en su cuenta de Twitter.
David Allen Turpin (57) y Louise Anna Turpin (49), fueron acusados de tortura, abuso y negligencia, indicó Hestrin, citado por DPA, quien se mostró horrorizado por el caso. "Como fiscal, hay algunos casos que te atormentan", confió, para aclarar que "algunos rayan en la depravación humana, y con eso estamos tratando aquí". "Las víctimas eran atadas como una forma de castigo, primero con cuerdas y luego con cadenas", describió Hestrin, y agregó "muchas veces no eran liberadas de las cadenas para ir al baño".
El fiscal reveló otros detalles, como que los padres compraban comida y dejaban que varios de sus hijos malnutridos la miraran, pero no la compartían con ellos.
Al respecto, comentó que uno de los niños, de 12 años, tenía el peso promedio de uno de siete años.
Además los padres forzaban a sus hijos a mantenerse despiertos toda la noche y dormir durante el día, a lo que se agregaba la prohibición de jugar con juguetes, dijo Hestrin.
La policía descubrió el lunes a los hijos de la pareja, de entre dos y 29 años, algunos de ellos encadenados a sus camas, después de que una de las hijas, de 17 años, escapó de la vivienda en la ciudad de Perris, 115 kilómetros al sureste de Los Ángeles, California, y llamó a la policía.