"No dice levantemos el teléfono móvil para hacer una foto. No, eso es feo", agregó.
"A mi me pone muy triste cuando celebro aquí en la plaza o en la basílica y veo tantos teléfonos móviles alzados. No solo de fieles, sino también de algunos sacerdotes e incluso obispos. ¡Por favor! La misa no es un espectáculo", insistió Francisco.