"Deploro estos actos de violencia y rezo por los difuntos, por los heridos y por sus familias", añadió Jorge Bergoglio.
También pidió a Dios que "convierta el corazón de los terroristas y libere el mundo del odio y de la locura asesina que abusa del nombre de Dios para diseminar la muerte". El martes una camioneta atropelló en Nueva York a varios ciclistas y transeúntes. Ocho personas murieron y once resultaron heridos en el atentado, el primero en la ciudad desde 2001.
Según varios medios, el conductor de la camioneta era un uzbeko que llegó a Estados Unidos en 2010 y que gritó "Allah Akhbar" ("Dios es grande") cuando salió del vehículo.
El sábado un atentado en Mogadiscio (Somalia), reivindicado por los islamistas radicales shebab, dejó al menos 27 muertos. Y el martes en Afganistán un adolescente se hizo estallar en Kabul, provocando la muerte de al menos cinco personas.