Mientras el Gobierno espera poder recibir a Francisco al menos con un cese del fuego con la otra guerrilla aún activa, el Ejército de Liberación Nacional (ELN), el Papa llegará por tercera vez en su vida al país sudamericano, con visitas a Bogotá, Villavicencio, Medellín y Cartagena de Indias.
En cada una de esas ciudades, la visita tendrá un tema central bien diferenciado, explicó el viernes el portavoz papal Greg Burke.
La agenda prevé los temas "Constructores de paz, promotores de la vida", en Bogotá el 6 y 7 de septiembre; "Reconciliación con Dios, con los colombianos con la naturaleza", en Villavicencio el 8; "Vida cristiana como discipulado", en Medellín el 9; y "Dignidad de la persona y derechos humanos", en Cartagena de Indias el 10.
Con el lema "Demos el primer paso", Francisco llegará a Colombia a las 16.30 locales (18.30 de Argentina) del miércoles 6 de septiembre, al cabo de un vuelo con un recorrido de casi 10.000 kilómetros, acompañado por sus colaboradores y un grupo de periodistas.
En cinco días de visita, el Pontífice pronunciará 12 alocuciones entre discursos, homilías, saludos y hasta el Ángelus del domingo 10, que dará en Cartagena de Indias antes de regresar esa misma tarde a Roma, donde su llegada está prevista para el mediodía del lunes 11.
En su quinto viaje a América Latina, el tercero a Sudamérica, Francisco tendrá actividades bien distintas en cada una de las cuatro ciudades que visitará. Tras ser recibido por el presidente colombiano Juan Manuel Santos en el aeropuerto "El Dorado" de Bogotá a su llegada, el miércoles 6 se dirigirá directo a la Nunciatura Apostólica, donde se espera para esa tarde un mensaje desde el balcón a los miles de colombianos que lo estarán esperando.
Para el jueves 7, también en la capital del país sudamericano, el Papa tendrá las actividades de jefe de Estado, con un encuentro privado con Santos en la sede de gobierno, y luego tendrá el primer cara a cara masivo con los fieles colombianos en el parque Simón Bolívar, justo después de encontrarse con la directiva del Consejo Episcopal Latinoamericano (CELAM).
El viernes 8, en lo que Santos definió esta semana en una entrevista como la fase más importante del viaje, Francisco recorrerá casi 100 kilómetros hasta Villavicencio, la puerta entre la Colombia urbana y la rural, que, según el mandatario, fue "una de las más golpeadas por el conflicto" con las Fuerzas Armadas Revolucionarias de Colombia (FARC), con las que se firmó la paz en 2016.
En Villavicencio, en medio del Parque Las Malocas, Francisco encabezará un "gran encuentro de oración por la reconciliación nacional", en el que Santos confirmó que, entre los oradores, habrá dos víctimas y dos victimarios del conflicto.
Fuentes vaticanas dijeron que habrá un pedido papal para que se avance en "pasos concretos" en esa línea.
Antes de la gran ceremonia por la reconciliación, el Papa beatificará a religiosos colombianos asesinados "por odio a la fe": el obispo de Arauca, Jesús Emilio Jaramillo Monsalve, asesinado por el ELN el 2 de octubre de 1989, y el sacerdote Pedro María Ramírez Ramos, muerto el 10 de abril de 1948 durante una revuelta popular.
También en Villavicencio, el Papa plantará un árbol "como signo de la reconciliación", anunció este domingo Burke, y recibirá a un grupo de 10 personas damnificadas por la inundación en la ciudad de Moncloa a inicios de año.
El viernes 9, en la etapa de más contenido pastoral de la visita, Francisco irá a Medellín para oficiar una misa en el mismo aeropuerto, "el lugar más grande que encontramos", según definió Santos, para luego tener una reunión privada con jóvenes argentinos y colombianos que participarán en un programa por la paz y la cultura.
Su paso por la capital del departamento de Antioquía incluirá también una visita al Hogar San José, que atiende a más de 1.000 niños en situación de vulnerabilidad social y un encuentro con religiosos, consagrados y seminaristas. Como durante toda la visita, Francisco volverá luego a Bogotá para dormir en la Nunciatura.
El último día de la visita tendrá como eje "los derechos humanos" y el Pontífice se dirigirá hacia Cartagena de Indias, en el noroeste del país, símbolo del tráfico de esclavos durante el período colonial.
Allí emergerá el "costado social" del viaje, aseguraron fuentes vaticanas, dado el contraste que hay en la ciudad caribeña entre las zonas destinadas al turismo rico y las periferias pobres en los márgenes del centro histórico.
Durante su paso por Cartagena de Indias, que en 2016 fue sede de la firma de los acuerdos de paz con las FARC, Francisco rememorará la figura del jesuita San Pedro Claver, que dedicó su vida a la defensa de los esclavos en el norte sudamericano.
