Temer fue acusado por un empresario de recibir sobornos durante el ejercicio de su mandato, que comenzó hace un año tras la destitución de Dilma Rousseff. Con el apoyo de su base política, Temer consiguió sortear la denuncia presentada por el fiscal general, Rodrigo Janot, y se libró de un juicio penal por corrupción.
Durante la ceremonia celebrada en Sao Paulo, Temer también elogió al alcalde de la ciudad, el empresario Joao Doria, cuyo nombre figura entre los posibles candidatos del Partido de la Social Democracia Brasileña (PSDB) para las elecciones presidenciales de 2018.