Chury Chemin era paranaense, aunque vivió también muchos años en Rosario. En su regreso a Paraná, a comienzos de los años 90, se dedicó de lleno a su pasión por el arte. Se la conoce por sus obras en tejido y artesanías diversas, collages, origami, dibujo y pintura, con la realización fundamentalmente de mandalas.
“Fue una referente del arte local y regional”; dijo el humorista Gráfico Maxi Sanguinetti a Elonce, al resaltar que Churi “era muy creativa, enérgica y siempre nos embarcaba en muchos proyectos y nos entusiasmaba con sus ideas”.
En este sentido, ponderó el rol de Chury en la feria de Salta y Nogoyá, “organizó muchos eventos culturales en el Puesto Ocho de la feria, participaban gente de diferentes ámbitos y surgían cosas muy lindas”, destacó.
“Era alguien que estaba muy conectada con la gente joven y trabajó en muchas áreas como publicidad, arte y estaba en la vanguardia”
“Tenía una estética muy de los sesenta, fue como Marta Minujin”, cerró.