“Tenía 19 años cuando fui a Malvinas y mi función era la de corneta de órdenes, donde cada toque tenía un significado. El 2 de abril fueron notas de alegría por haber recuperado algo que nos pertenece”, valoró Tabarez, a Elonce TV.
Según detalló Tabarez, con el correr de los días, las notas de su trompeta fueron acompañando todo lo que, sucedida en la guerra, “hubo una ocasión en que el sonido de mi instrumento se entremezclaba con los bombardeos”, sumó. Tabarez relató que “cuando nos volvíamos de las islas, me requisaron y un soldado se quedó con mi instrumento. Pero para él el remordimiento fue tan grande que un tiempo después me busco a través de un periodista y me la devolvió”.
“Cuando me la quitaron sentí un vacío muy grande, me faltaba un amigo, pero cuando lo recuperé para mí fue una alegría inmensa, si bien nos estaban pasando muchas cosas la trompeta pasó a ocupar un lugar central que había en mi interior”
“Voy a seguir rindiéndole honor con mi trompeta a los héroes de Malvinas hasta que Dios lo decida”. Volver a Malvinas
Según contó el trompetista, él volvió a Malvinas 37 años después de la guerra al cementerio de Puerto Darwin, al sur de la isla. “Fue muy fuerte, porque no volví con mis compañeros del 1982, sino con que con sus familiares”.