Según relató el periodista uruguayo Gustavo Descalzi en el programa Intrusos del canal América, Susana pedía originalmente 12 millones de dólares, pero a medida que pasaba el tiempo y no se vendía, fue bajando las pretensiones.
Trascendió que, hace algunos años, una persona interesada le ofreció 6 millones de dólares por la propiedad, pero en ese entonces la diva se negó. Luego, sin ofertas para La Tertulia, Giménez entendió que debía ajustar el valor de un inmueble que finalmente pudo vender el día que cumplió 77 años. La animadora debió sortear diversos inconvenientes durante la construcción de esa casa. “Tuvo problemas con el terreno, con la administradora. Y además está construida sobre un cementerio indio, según avalaron los antropólogos que estudiaron la zona”, expresó el periodista Descalzi.
“Susana compró en esa zona porque hay una energía especial, además de la belleza. Fue la que dio el puntapié inicial y supuestamente iban a seguirla otros futuros vecinos, pero la engañaron”, agregó.
“La visitó un chamán para encaminar las buenas energías y dio resultado. La compró un importante hombre de negocios del rubro de entretenimientos”, concluyó Descalzi. Según expresó el sitio uruguayo El Observador, La Tertulia esta edificada en un predio de 110 hectáreas, rodeada de un enorme entorno natural. La casa tiene 500 metros cuadrados cubiertos con seis dormitorios en suite, amplios livings y varios espacios para el relax. Sin embargo, cabe destacar que la chacra es bastante inaccesible y el pueblo más cercano queda a diez kilómetros.