Todo comenzó con un juego en la mesa que se le ocurrió a Barbarossa. Ella nombraba una categoría, y cada invitado (Sol Pérez, Federico Bal, Guillermo Coppola y Tagliani) tenía una pizarra y debía indicar cuál de los invitados se adecuaba más a cada consigna.
La primera pregunta jugada de la actriz anfitriona sentada en la cabecera fue "¿Cuál es el más probable al que le ofrecieron dinero a cambio de sexo?", a lo que el hijo de Carmen Barbieri respondió que era "muy fácil contestar", por lo cual empezó a develar que había escrito el nombre de pila de la ex chica del clima, justificando que "es una bomba sexual". Sol puso a Coppola porque "lo dijo él"; el exrepresentante de Diego Maradona eligió a Lizy, mientras que la comediante lo puso a Bal. Cuando comenzaron a bromear entre ellos, Tagliani lanzó una pícara broma: "Mi amor, ¿con qué te creés que compro el departamento?".
El juego continuó de la mano de Barbarrosa y una nueva pregunta: "¿Quién es el más probable que reciba propuestas indecentes?". Fede Bal dijo: "Es lo mismo, che", pero cuando revelaron sus pizarras, todos cambiaron de nombres. El actor puso a Lizy; Pérez a Fede; Coppola a Sol y Lizy a Guillermo.
En medio de chistes, Tagliani preguntó quién la había elegido y allí confesó qué tipo de propuestas indecentes recibió. "Sí, sobre todo de parejas heterosexuales", confesó frente a la mirada atenta y sorprendida de sus compañeros de mesa. Y ahí la conversación se puso más picante y Georgina se la jugó repreguntando: "¿Propuestas swingers?"; y la conductora dijo: "Ay, no, ¡por favor!".
Las consultas hacia Lizy siguieron a causa a la curiosidad, y Pérez le preguntó si alguna vez aceptó una de esas propuestas, y la respuesta de la indagada contó con una fuerte dosis de humor. "No, jamás mi amor. Yo nunca vi una . . . ni cuando nací, nací por cesárea, así que no", disparó la conductora, que ante la insistencia de Bal acerca de si le gustaría algún día decirle que sí a una oferta de ese tipo, reiteró con firmeza que no lo haría.