Sin embargo, su denuncia fue el incentivo que necesitaron otras mujeres para animarse a hablar. Desde Anita Co hasta Thelma Fardin, todas admitieron que fue Calu la que les demostró que no estaban solas.
Y luego que el juez del Décimo Distrito de lo Penal de Audiencia de Managua, Celso Urbina, pidiera la captura internacional y detención del actor, Calu habló al respecto.
"Estaba volviendo de Grecia, donde fui para hacer un seminario de actuación. Había estado incomunicada y llamé a mi hermana. Ella me lo contó y yo no pude parar de llorar. Lloré como una nena", manifestó.
"Para mí, fue una manera de ver claramente nuestra fortaleza materializada. Ahora sí: ¡lo pide la justicia! Esto implica un antes y un después en la historia de la industria del entretenimiento de nuestro país", añadió.
Por estos días, Calu sigue instalada en Nueva York y aunque no tiene previsto regresar al país próximamente, sigue atenta todos los avances de esta causa. "Hoy, me siento más digna que nunca".