No pasa una noche en la que la modelo Karina Jelinek se vaya a dormir sin saludar antes a sus "ángeles", los miles de seguidores que tiene en la red social Instagram.
Pero el martes, el sueño le jugó una mala pasada y la morocha publicó un anuncio muy sexy, en el que se mostró a punto de ir a la cama, desnuda y cubierta con una crema corporal.
Quizás no advirtió que el angular de la cámara dejó ver un poquito más de lo que ella hubiera querido.