"Estaba jodiendo, fue una travesura. No era mi teléfono y no era mi intención que pasara esto. No quise faltarle el respeto a nadie, menos a la universidad. Si bien lo que se ve en los videos forma parte de mi personalidad, no es lo único que soy", explicó al sitio Diario Registrado.
"Fue un buen video, ¿que tiene de malo? Es una terrible chupada de chupetín. No se por qué tuvo tanta repercusión, supongo que será porque lo chupo bien. Es una muestra de un don que tengo en la vida real", agregó.
Annalisa, de 21 años, vivió en Roma hasta los 17, cuando retornó a Buenos Aires con su madre, mientras que su padre se quedó en Italia. Según sus palabras, no le interesa la repercusión mediática ni hacerse famosa. Dice que sus grabaciones se filtraron en la Web sin su consentimiento y que no lo volvería a hacer.
Un compañero de clase, el dueño del teléfono, los subió a la Web una semana después de filmarlas. "Estaba entrando a la facultad y me dijieron 'che que buenos tus videos', y yo no entendía nada. Después me enteré que se los pasaban por celular. Al principio me divertía, porque pensé que se los iban a pasar entre los teléfonos de los flacos y nada más, pero después los vi en Youtube y me quise matar", explicó.
Definiéndose como "muy católica", la chica aclara que no quiere ser reconocida como "la del video", pero enseguida dispara: "Yo soy así en la vida. Soy la típica calientap . Yo te voy a provocar y obtener lo que quiero, pero sin acostarme con vos. Estuve con un solo hombre, fue el año pasado, y lo amé muchísimo. Traté de cambiar para él, pero se ve que no fue suficiente. Ahora está feliz con otra persona".
"Si no hay amor no tengo sexo. Tengo esta dualidad que, si bien puedo ser la mina que te calienta hasta morir, también soy la mina que va a la iglesia y reza el rosario y se acostó con un solo hombre. Soy dos minas", aseguró.
Y siguió: "Calentar a los hombres me da poder, me hace sentir importante. Siento que soy buena, cada persona tiene su habilidad o nació para algo. Los flacos que tienen novia, por ejemplo, me encantan. Me gusta provocarlos, que se obsesionen conmigo y hacerlos dudar de su pareja. Me divierte ver hasta dónde puedo llegar. El morbo, que sea prohibido".
El sueño de Annalisa es "formar una familia y tener tres o cuatro hijos. La clave de todo esta en saber cuándo parar, sé que no puedo ser una calientapavas toda la vida, pero también sé que esa seducción que llevo adentro no va a apagarse con los años. Tengo que aprender a manejarla", sostuvo.
En cuanto a su hombre ideal, "el perfil que me gusta es el rugbier. Formado, con músculos. Además tiene que ser humilde". Fuente: Diario Registrado
