La faena registrada entre enero y junio del año pasado había sido de 6,4 millones de cabezas.
Ese porcentaje es sólo superado por el 14,1% registrado durante el primer semestre del 2009, año en el que se iniciaba una fuerte liquidación del rodeo nacional, sostuvo el informe de Rosgan.
"A diferencia de aquel año en el que tanto machos como hembras vieron crecer fuertemente su faena, en estos seis primeros meses del año se observa un importante crecimiento en machos y una leve caída en hembras", dijo el informe.
"La industria frigorífica ha logrado adaptarse muy rápidamente a los nuevos protocolos de trabajo impuestos por el Covid-19 pero también el productor ganadero lo ha hecho, reaccionando a las distintas señales que fue dando el mercado", sostuvieron los analistas de Rosgan.
Desde fines del año pasado, la paralización de las compras chinas obligó al productor a replantear súbitamente el negocio vacuno, que para muchos se había convertido en la caja de emergencia, ante del complejo escenario que atravesaba la economía local.
