Además, la bolsa detalló que el 53% de las 750.000 hectáreas implantadas con soja de primera posee una condición entre "buena y muy buena"; mientras que un 2% de las 420.000 hectáreas sembradas presenta esa misma condición.
Los números obtenidos no incluyen impuesto inmobiliario rural, impuesto automotor, IVA, ingresos brutos y ganancia, explicó el organismo.
En la zona sur, el productor necesitará cosechar 1.880 kilos de soja de primera sin arrendamiento y 2.680 con arrendamiento, para alcanzar un resultado positivo; mientras que en la zona norte deberá obtener 1.930 y 2.430 kilos, respectivamente.
En la zona oeste se deberán cosechar 1.810 y 2.610 kilos por hectárea sin y con arrendamiento; en tanto que en el este de Entre Ríos se tendrán que producir 1.930 y 2.430 kilos, respectivamente.
El rendimiento promedio es de 2.175 kilos por hectárea, 370 menos que el necesario para cubrir costos de los productores que deben arrendar (2.545); mientras que solamente los productores con campo propio tendrán un margen bruto favorable de 292 kilogramos por hectárea promedio.
Respecto a la soja de segunda, que tiene un promedio de 1.662 kilogramos por hectárea requeridos para cubrir los costos; sólo los productores con campo propio de la zona oeste de la provincia tendrán márgenes económicos favorables.
El informe semanal señaló que durante el periodo crítico de la oleaginosa tuvo un fuerte déficit hídrico que redujo el potencial de rendimiento, y que deberán actualizarse las tarifas de los fletes.
También, la buena cosecha de Brasil generó una caída en el precio internacional "trae aparejado que se eleve el rendimiento" que el productor argentino debe obtener para cubrir los costos.
