El artículo 18 de la ley de Emergencia y Solidaridad faculta a la AFIP a establecer un régimen de reintegros "para personas humanas que revistan la condición de consumidores finales destinado a estimular comportamientos vinculados a la formalización de la economía y el cumplimiento tributario". Se concentrará en la compra de alimentos y otros productos de la canasta básica. La norma no hace ninguna referencia al IVA y la razón -según explicaron los funcionarios- es porque ese impuesto es un tributo coparticipable, y en consecuencia los efectos de toda decisión que afecte su nivel de recaudación impactarán sobre el fisco nacional pero también sobre los provinciales.
Para no entrar en conflicto con las provincias -como le ocurrió a Mauricio Macri, cuando estableció la exención del IVA para algunos alimentos luego de las PASO- y para no alterar el esquema de distribución del IVA se optó por un reintegro general, dejando a la AFIP su instrumentación, que se espera será para antes de fin de mes.
Que el reintegro será por el pago con tarjeta de débito y con un tope de $ 700 por mes para las personas de menores recursos ya había sido adelantado, antes de fin de año, por fuentes de la AFIP. En el organismo estiman que podría abarcar a un universo de 5 millones de personas.
El Ministerio de Economía fijará el presupuesto para esos reintegros, publica el diario Clarín.
