Consideró que "hay un consumidor con otro patrón de conducta, al mirar mucho más donde le cierra la ecuación de valor por dinero" y afirmó que ahora es "muy controlado, ordenado y prudente".
"La idea forzada por las tarifas inicialmente de llevar a los consumidores argentinos a una cosa más sensata, para mí, está más para quedarse que para ir para atrás", indicó.
Destacó que en el comportamiento del consumo en la Argentina impacta de manera positiva "la estabilidad del tipo de cambio porque a los argentinos le da tranquilidad" y una "progresiva desaceleración de la inflación".
Puntualizó que también representó una mejora "la llegada de los sueldos nuevos".
"Se cerraron la mayoría de las paritarias en mayo y se empezó a cobrar en junio", remarcó y sostuvo que los salarios "habían perdido en la primera parte del año".
Analizó que el consumo también tuvo un movimiento ascendente por "los estímulos al consumo lanzados por el Gobierno".
Según su criterio, el 2019 fue "un año difícil que llegó hasta abril".
En diálogo con FM Milenium, señaló que "las segundas marcas subieron casi diez puntos con respecto a 2015".
Evaluó que un mayor adquisición de bienes durables en los últimos meses "tocó el consumo más cotidiano" y ello impactó en las ventas de los supermercados.
"El cambio más importante en patrones de conducta en canales de compra es la incorporación del consumidor final comprando en mayoristas", resaltó Oliveto.
NA
