El dueño del comercio creyó haberle encontrado "la vuelta" a los tarifazos, pero la avivada le terminó saliendo muy cara. Durante 4 años alteró su medidor para mantenerlo en cero. Sin embargo, una inspección de la Empresa Distribuidora de Electricidad de Salta (Edesa) descubrió la trampa.
Ahora el comerciante deberá pagar una multa de 1,2 millones de pesos.
El gerente de Relaciones Institucionales de Edesa, Hugo González, aseguró a Cadena 3 que se detectaron varias irregularidades en medidores de luz en Tartagal y Orán.
Son tres casos de diferentes rubros que con la adulteración tenían consumo cero, entre los que se destaca la heladería, que deberá pagar $1.200.000.
"Primero se viene el cobro efectivo y, además, estamos en condiciones de hacer una denuncia penal", indicó González.
Otros usuarios, por diferentes adulteraciones, deben abonar entre 200 mil y 400 mil pesos.