Economía El debate en El Ventilador

Suba de precios: ¿cuánto necesitamos los entrerrianos para vivir?

La inflación no se detiene. El Ventilador abordó con especialistas, comerciantes y voluntarios pertenecientes a ONGs cómo nos afecta la suba de precios y de qué manera hemos cambiado nuestros consumos en este escenario económico.
No hace falta ser un economista para analizar cómo la suba de precios está impactando en el costo de nuestras vidas. En este contexto, ir al supermercado dejó de ser una experiencia agradable para convertirse en un ejercicio de "exploración y comparación de precios".

Los números no mienten: en un almacén de barrio un paquete de yerba Rosamonte, de medio kilo, que en enero estaba 28 pesos, ahora cuesta 35. La leche que hasta hace unos meses se vendía a 18 pesos, hoy sale 25. Y el aceite pasó de 37 a 57 pesos.

Mientras tanto, fruto de la caída del consumo que lleva ya varios meses, todos coinciden en afirmar que las ventas, ya sea en supermercados o en los mercaditos de barrio, han acusado bajas importantes.
En Entre Ríos, en junio, la suba de precios medida por el observatorio provincial marcó un 3 por ciento y haciendo la comparación interanual, de junio del año pasado a junio de 2018, el aumento fue del 27,5 por ciento.

Pero... ¿cuánto necesitó el mes pasado una familia de cuatro integrantes en Paraná para no caer en la pobreza?... 14 mil pesos, de los cuales un importante porcentaje se lo lleva el transporte y los servicios públicos.

Mientras tanto, el deterioro de los salarios no da tregua y la recuperación del poder adquisitivo sigue quedando varios puntos atrás.

Hoy, se dio a conocer la inflación de junio a nivel nacional, cuyo índice superó los presagios que se establecieron como meta a comienzos de año. Este número, "colabora fuertemente" para que el índice anual supere ampliamente el porcentaje esperado desde el gobierno Nacional.

Inflación y crisis


El proceso inflacionario nos alcanza de diversas maneras y va marcando el ritmo de nuestros consumos: en qué gastamos? ¿Qué dejamos de hacer a causa de la suba continua de precios; en qué nos estamos restringiendo?

El escenario económico del país obligó a muchas personas a modificar sus conductas como consumidores. Frente a eso, que muchos compradores hayan migrado a las denominadas "segundas marcas" o que se hayan volcado a los hipermercados mayoristas, dejó de ser una novedad, como también optar por compras semanales siguiendo las ofertas y los promocionados descuentos.

En el medio y para `capear` el temporal, los gobiernos fueron echando mano a distintas estrategias para contener los aumentos. Hoy, en el país está vigente el programa "Precios Cuidados" que contempla un listado de más de 300 productos a un valor acordado con la Nación, pero que según se observó, no se trata de elementos cuyo valor pueda influir demasiado en la inflación.

Mientras tanto, los sectores más vulnerables aparecen como los más castigados. En épocas de crisis las necesidades se acentúan. Y una de las consecuencias es la demanda cada vez más constante de asistencia alimentaria.
De la mano de vecinos solidarios han surgido nuevos comedores comunitarios y los que ya existían incrementaron la cantidad de asistentes.
Según datos del ministerio de Desarrollo Social, en todo el territorio entrerriano, más de 55 mil personas comen en comedores comunitarios...
La inflación, el aumento de los servicios públicos y la falta de trabajo son algunos de los factores que están en el detrás de escena y repercuten cada vez con más fuerza.

Lo que viene, "más ajuste"


Los pronósticos para los próximos meses, tampoco son alentadores. Con una inflación que en el primer semestre superó ampliamente las previsiones oficiales y frente al objetivo del Gobierno de disminuir aún más los subsidios a las empresas de servicios, no es de descartar que en el corto plazo el aumento de los costos vuelva a trasladarse a las tarifas de la luz y el gas, provocando un nuevo golpe al bolsillo del usuario, lo que generará graves perjuicios principalmente en los sectores más vulnerables.

Además, habrá nuevas directrices a cumplir por parte del FMI, el ente de crédito que puso sus condiciones para traer a la Argentina más de 50 mil millones de pesos durante tres años con la intención de saldar el déficit fiscal.

Ya es inocultable la preocupación entre los gobernadores que sienten que los costos de la situación económica serán transferidos con más fuerza a las provincias a través del recorte de fondos. Entre Ríos y por supuesto Paraná, no quedarán exentas.

Tanto el conductor, como los panelistas del programa que se emite martes y jueves, Lalo Foncea, Ana Tepsich, Claudia Yauk, Mariano Kohan, Sebastián Martínez y Luz Alcain, fueron haciendo sus aportes al tema.
El conductor del programa Lalo Foncea abrió el programa mencionando las cifras dadas a conocer por el Indec, este martes. "Con este aumento del 3,7 % de junio ya se superó la expectativa del 15 % que se tenía para todo 2018", expresó. Se trata de la peor medición desde mayo de 2016 (25 meses atrás). Además, se registró una inflación interanual de 29,9%.
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Hay aumentos que parecen ser por goteos pero a la larga terminan impactando en la economía de todos

El periodista Sebastián Martínez, consideró que "hay aumentos que parecen ser por goteos pero a la larga terminan impactando en la economía de todos. Esto se refleja en todo lo que gastamos cuando vamos a la despensa, al supermercado o a pagar algún servicio. Es algo de la economía pero lo palpamos todos".

"Yo suelo hacer compras mensuales en diferentes supermercados y voy comparando. De un mes a otro los precios aumentan", dijo.
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En Argentina mandan las empresas

El panelista Mariano Kohan, indicó que "uno compra, sigue las ofertas, el 2x1. Cuando llega el resumen de la tarjeta no lo podés creer. Aumentaron mucho los precios. Estas son las reglas del libre mercado, en Argentina mandan las empresas".
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Desde el Estado no hay regulación, no hay control, no hay freno

La panelista Luz Alcain mencionó que "uno está acostumbrado a escuchar qué pasa con las Lebacs, que pasa con el dólar, pero lo importante es ver qué le pasa un jubilado nacional cuando va a la farmacia, qué le pasa a Suma de Voluntades cuando tiene cada vez más demanda, qué está pasando en la realidad cotidiana cuando uno va al supermercado".

Entendió que "desde el Estado no hay regulación, no hay control, no hay freno. Recordemos que hubo un personaje por construcción mediática, que fue demonizado, Guillermo Moreno? Hoy uno no tiene idea quién lo sucedió, ¿qué está haciendo para regular?".

Y si se piensa en los altos costos de vida y la incidencia en la población, Alcain resaltó que "hay 166 mil jubilados en la provincia que están padeciendo un aumento desproporcionado respecto de los ingresos, que han tenido desde la reforma jubilatoria para acá, además están padeciendo prestaciones que se retacean por parte del PAMI desde enero de 2017 para quienes tiene casa y terreno, para quienes tengan un auto con menos de diez años, es decir con el avance de distintos criterios que han impedido el acceso a gran cantidad de esta población, de la gratuidad del 100 % en los medicamentos".
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Compro siempre las mismas cosas y se ven los incrementos

Ana Tepsich, por su parte contó que en su caso particular va "semanalmente al mismo supermercado, compro siempre las mismas cosas y se ven los incrementos. Pero es cierto que uno anda detrás de las ofertas de uno y otro local, aprovechando los beneficios que ofrecen los distintos comercios".
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"Anses está presente con todos los beneficios y programas"
Enrique Susevich, titular de Anses, opinó que "en el tema medicamentos, al principio la realidad indicaba que en todas las instituciones que prestan beneficio social había abusos en los costos, pero también había personas perjudicadas".

Sobre la situación actual, dijo que "Anses está presente con todos los beneficios y programas que tenemos disponibles. Los jubilados tendrán cuatro aumentos y no están puestos por la recaudación, sino por un 70% equivalente a la inflación y un 30% que tiene que ver con el aumento promedio de salario. Para decir que el jubilado durante el año va a perder algún peso hay que esperar a diciembre".

"A los discapacitados se les sigue pagando la pensión no contributiva, se cometió un error el año pasado pero se remendó y se volvió a pagar. Lo que si remarco es que hay un error que hay que controlar porque se está yendo dinero de más del Anses, y tiene que ver con el pago de las pensiones no contributivas. Cuando comenzó el período del gobierno anterior eran 70.000 en el país y hoy son más de 1.100.000. Hay cosas que no se hicieron del todo bien, hay que verlas y corregirlas si es necesario. No podemos dejar que sigan existiendo como si nada pasara", consideró.

Ante las necesidades más urgentes de la gente, Anses "ofrece la Asignación Familiar, que este gobierno la equiparó con la Asignación Universal y ahora no hay diferencia. Además, pagamos las asignaciones familiares a monotributistas: hay 500 mil chicos cuyos padres hoy la cobran y antes no. Tenemos la Pensión Universal para Adulto Mayor, que permite que aquellos que tengan 65 años o más cobren una jubilación universal y servicio de PAMI; esto equivale a un 80% de la jubilación mínima. Seguimos con los Créditos Anses, que eran los Créditos Argenta. También otorgamos subsidios por desempleo y de contención familiar (6000 pesos), para aquellos familiares que pierden a un jubilado. El 55% del presupuesto nacional está destinado a asistencia social".

"Hoy la Asignación Universal es de 1528 pesos por chico, por mes. La obligatoriedad es tener puestas las vacunas del calendario anual y la escolaridad del año calendario. Hay un formulario que hay que presentar durante todo el año en Anses. Hay que controlar todo pero también hay algunos problemas: hay que ver cómo saber que ese certificado es correspondido con la educación que reciben. Conozco casos de docentes que fueron amenazadas para firmar la asignación. Hay que diferenciar el paso de grado del chico y tener un certificado que concurrió todo el año a clases", comentó.

"Desde el año 2017 hasta la fecha incorporamos 500 mil chicos a la asignación universal que no tenían DNI, que no cobraban eso y nadie sabía que existían", finalizó.
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"Todos los años los jubilados vienen perdiendo"
Carlos Levinez, representante provincial en la mesa nacional de jubilados, dijo que "antes se comían fideos, pan. Hoy hablar de eso es mala palabra. Lo que más subió es la harina. La mayoría de los jubilados cobra la mínima, 8000 pesos, y la canasta básica de un jubilado a nivel nacional ronda los 20.000 pesos. No cubren ni el 50% de la canasta básica".

En ese sentido, señaló que "todos los años los jubilados vienen perdiendo. Hubo años en los que esto se recuperaba, pero desde hace 3 años atrás vamos perdiendo muchísimo sobre la canasta básica, sumado a los tarifazos de gas y luz. A los jubilados no hay que darles créditos, hay que aumentarles el salario".

"El gobierno no controla ni la economía ni los precios porque a eso lo controla el mercado. El problema es el sistema económico que se aplica en cada país, de ahí parten todos los inconvenientes", agregó.
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"Se demonizó el control de precios y hoy en día es la única salida"
La Licenciada en Economía e Integrante del Observatorio provincial de precios, Laura Bevilacqua, explicó que "desde hace muchos años el organismo viene relevando los precios en Paraná. Nosotros los ayudamos en las cuestiones metodológicas y en los resultados. Los valores se construyen a partir de la canasta, que es representativa. Las realidades de cada persona son distintas. Uno espera los índices nacionales pero en realidad la inflación o la canasta no es más que conocer lo que uno consume y cómo esos precios van aumentando a lo largo del tiempo".

"Tiene un impacto conocer el índice porque uno tiene que tener un precio de referencia para tomar políticas públicas. Actualmente con el índice de inflación hay una alerta muy clara de cómo la situación se sigue agravando. Argentina es uno de los países más complejos para ser ministro de Economía. Nosotros estamos muy adaptados a las crisis que sufrimos, es cíclico", aseguró.

Por otra parte, expresó que "se demonizó el control de precios y hoy en día es la única salida que queda, lo demuestran los mismos números. Si no hacen mayores controles no hay forma de salir de este brete, porque todo va al sector financiero, el dólar sigue aumentando e impacta en los más pobres, que son los que tienen mayor incidencia de consumo en los productos básicos".
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"En la provincia se realiza el relevamiento de índices de precios"
Rosario Burgos, titular de Estadísticas y Censos de la provincia mencionó que en la repartición provincial lo que se hace es "llevar adelante el relevamiento de los índices de precios. A través de nuestros encuestadores, se toman los precios, se ingresan en formularios predeterminados por el instituto nacional. El que procesa y elabora es el Indec.

En estos momentos se trabaja en la Encuesta Nacional de Gastos de los Hogares. En este sentido Burgos indicó que se tratará de reflejar los hábitos de consumo de los hogares. Cada encuestador, con cinco cuestionarios en los que se pregunta sobre gastos e ingresos, se capta todo y luego se usa de base tanto en índice de precios como en una renovación y actualización de la canasta básica". El relevamiento comenzó el año pasado en noviembre y dura un año. En la provincia abarca a 21 localidades. "Incluye ítems como salud, servicios, vivienda, transporte, vehículo, alquiler? es lo que compone la canasta básica y la canasta total, se pregunta respecto del gasto del hogar. Contestan hasta los chicos de 10 años y más, ", relató.

"Como novedad, en esta oportunidad, el Indec hace en esta encuesta una parte contable y otra parte en cuestionario papel", agregó.
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"El gobierno tiene una política que no permite tener una paritaria libre"
Juan Carlos Navarro, desde la Asociación Bancaria, gremio que logró uno de los acuerdos paritarios más altos, aseveró: "Hemos tenido acuerdos salariales importantes, algunos casi mejores que el común de los acuerdos logrados. Esto también tiene que ver con la actividad que uno desarrolla, ya que el sector financiero es el más rentable y ha venido con ganancias desde 2003, año desde el cual no ha parado de ganar, eso es lo que nos permite discutir una mejora salarial".

No obstante, recordó que "el gobierno tiene una política que no permite tener una paritaria libre, pone un techo y sobre este, es la discusión con sectores que pueden superar ese techo, porque la rentabilidad del sector lo permite. Indudablemente con este techo que puso el gobierno para los techos salariales, están todos los gremios desfasados. Cuando llegue la revisión que se firmó en la mayoría de los acuerdos salariales, teniendo en cuenta las condiciones en que se encuentre cada actividad, va a venir la discusión; lamentablemente creo que en algunas actividades se terminará cubriendo con una suma fija. Será un paliativo, pero que arranca la discusión paritaria el año que viene, con una situación del salario a la baja que va a dificultar nuevamente y se generará una nueva pérdida. Va a haber actividades que no estarán en condiciones de actualizar el salario de acuerdo a la inflación".
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"A esta recesión no la he visto antes"
Gabriel Muñoz, empleado de Supermercados Coto y delegado del S.E.C, manifestó que "los trabajadores sentimos que estamos en una situación complicada y lo vemos en la realidad. Cualquiera va al supermercado y puede notar la merma de posibilidades adquisitivas en la compra de alimentos básicos para la familia. Más allá de las estrategias de mercadeo y la parte competitiva que llevan a cabo las empresas para sobrellevar esto, está resentida la economía".

Asimismo, dijo que "a esta recesión no la he visto antes. Se ve en el volumen de consumo pero también en la actitud de consumo. Antes iba la familia entera al supermercado y todos se compraban a su gusto lo que querían, pero hoy está restringida esa posibilidad, se ve en la góndola. Los productos que no son alimentos son los más evitados en la compra. Hay otras prioridades. El humor del comprador es otro: está muy sensible al costo".

Y agregó: "Es mentira que no existe el control o que no debe existir, es un teoría. Cuando esos controles tienen determinados condicionamientos sobre los monopolios o grandes formadores de precios, es lógico que lo resistan".

Comentó que "hay supermercados que están con dificultades para mantener su competitividad. Tienen problemas logísticos por la falta de ventas. Empiezan a aflorar un montón de problemas. En Coto hasta el momento no hubo despidos y creo que los empresarios están siendo sensibles a esto".

"Argentina es un país que está siendo observado en cuanto a los índices de confianza que hay sobre la economía: las inversiones no vienen, el dólar se dispara, los combustibles están cada vez más caros, los impuestos suben y eso no es algo bueno para el empresario, mucho menos para nosotros", aseveró.

Pidió "evitar las compras online porque quitan muchos empleos. Seamos conscientes de que eso afecta a los trabajadores. Esto es una amenaza y una herramienta que va a ser el desequilibrante de la economía local ahora y a futuro".
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"En la comercialización, inevitablemente, los monopolios forman los precios"
Pablo Romero es presidente del Centro de Almaceneros. "Los pequeños y medianos comerciantes tenemos nuestros recursos para ofrecer en algunos sectores como `frescos, carnicería y verdulería`, precios razonables. Nos resulta difícil competir en góndola, enlatados y limpieza", aseveró.

"Mis clientes no son clientes exclusivos de mi negocio, compran en los súper, en los hipermercados y otros en mi negocio. Estamos en una situación complicada, pero creemos que tenemos las herramientas para seguir compitiendo", reconoció.

Asimismo, Romero, al ser consultado respecto de cómo influye la formación de precios que hacen las grandes cadenas en el sector de medianos y pequeños comerciantes dijo que "en cuanto a los componentes en la formación de precios, hay algunos que son inevitables, como el costo, la producción, el transporte. En la comercialización, inevitablemente, los grandes monopolios son los que forman los precios. Los pequeños comerciantes tenemos que sufrir las consecuencias de este esquema. El control debe existir, no a la manera de Moreno, pero de otra forma. El Estado debe estar presente".
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"Cada día se acrecienta más la cantidad de personas que nos piden comida"
Anabella Albornoz, integrante de la ONG Suma de Voluntades, señaló que "estos contextos de crisis se notan y se sufren. Si hay que hablar de una sociedad más justa primero hay que reivindicar los derechos de aquellas personas que a diario la vienen peleando. Cada día se acrecienta más la cantidad de chicos que asisten a los comedores y la cantidad de gente que nos pide comer en las recorridas nocturnas que hacemos".

Contó que "empezamos trabajando con la niñez pero eso implica trabajar con su contexto, con la familia completa. Tratamos de evitar todo tipo de asistencialismo. Nosotros conocemos nombre, apellido e historia de vida de cada persona que ayudamos. Cada uno procesa su dolor y para nosotros la solidaridad es decir `acá estoy´, independientemente de la mochila que carguen. Esto va más allá del plato de comida".

Remarcó que "hay personas que no están en situación de calle pero no tienen el sustento diario para la familia. Los nenes van con tanta tristeza a pedir comida que a veces ni levantan la mirada. Hay formas de salir adelante, ellos tienen sueños. Hay un niño que no había forma de sacarlo de arriba del caballo, pero logró terminar la secundaria, se ganó una beca y hoy estudia peluquería. Hay esperanza".
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"No nos olvidemos de las personas"
El sacerdote Javier Murador, desde Cáritas Paraná, mencionó que "cada parroquia tiene su tarea de Cáritas con la gente vecina, y a la vez, todas las parroquias de la diócesis tienen un equipo que lo coordina, que a la vez hacemos de nexo con Cáritas nacional. Uno puede tener una cierta perspectiva más de lo global, de gente de Feliciano hasta Diamante, Nogoyá hasta Villaguay y todo lo que es el departamento Paraná. La situación está complicada, siempre estuve como sacerdote en esta ciudad, empecé en zona dela Iglesia Guadalupe que está en zona de La Floresta, después estuve en la Parroquia San Agustín, trabajé cuatro año en el Gaucho Rivero, estuve en Luján en zona de barrio Rocamora, y ahora estoy en Juan Bautista en zona de barrio Los Cuarteles. Siempre pude acompañar a un grupo que se llama Apostolado Madre Teresa que todos los sábados va a la Iglesia Guadalupe, al barrio San Martín y Barrio Humito. Juegan con los chicos y como excusa, hay una merienda. He tenido el contacto de primera mano con mucha gente que no la está pasando bien".

"No nos olvidemos de las personas, porque hay números, un montón de changuitos que no andan pero acá hay un montón de gente, historias de vida de gente que la pelea. Hemos naturalizado que todos somos sobrevivientes, acostumbrados a la crisis. Cáritas trabaja siempre con los pobres. Hay programas de reconstrucción en época de inundaciones, de promoción de construcción de viviendas, trabajos lindísimos con la gente que aprende oficios y terminan teniendo su hogar", aseveró.

En el mismo sentido, dijo: "ha mermado el pedido de ropa, en algunas situaciones tienen más acceso a esto, pero lo diario sigue estando".
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