En marzo, el presidente, Mauricio Macri, anunció una baja de la pobreza que alcanzó a un 25,7 por ciento de la población durante el segundo semestre de 2017, casi cinco puntos en un año y 6,5 puntos por debajo del registro de septiembre de 2016. Al asumir, Macri anunció que su objetivo sería orientar su Gobierno hacia la "pobreza cero", el indicador según el cual debería ser evaluada su gestión.
Desde entonces se registró sin embargo una aceleración de la inflación, que en los primeros cuatro meses de este año ya acumuló casi un diez por ciento, con una retracción de la actividad económica y el consumo.
Según los últimos informes que recibe el Banco Central, los consultores privados estiman que la inflación escalará en 2018 por encima de un 27 por ciento.
"La tendencia a la mejora que se había observado en el segundo semestre de 2017 se vio paralizada con ya un rebote inflacionario en el primer trimestre, tras la devaluación de diciembre, y un proceso de estancamiento en el sector informal de la economía", señaló Salvia a la radio Milenium de Buennos Aires.
El experto subrayó que "esto se vio agravado con una nueva devaluación del mes pasado, también con efecto en la inflación, y el aumento de tarifas". "Todas las evidencias demuestran que va aumentar la pobreza en forma no explosiva pero sí importante", remarcó.