
El desafío para el equipo de Miguel Almirón, que se prepara para afrontar las semifinales de la Copa Libertadores ante Palmeiras, cuyo encuentro de ida se jugará el jueves 28 en la Bombonera, es quebrar esta seguidilla de tres derrotas seguidas en la misma competencia. En la segunda fecha, perdió 1-0 con Sarmiento en Junín, luego con Tigre 1-0 en la Bombonera y el viernes también 1-0 con Defensa en Florencio Varela.
Más allá del presente en la competencia local, el plantel de Boca llegó a Santiago del Estero ayer por la tarde y recibió el cariño y la admiración de los hinchas xeneizes de la provincia. Lejos de la preocupación de ser testigos de una racha negativa histórica.

Con anterioridad, otras cinco veces perdió cuatro encuentros al hilo. La peor racha es de siete en el Metropolitano de 1984, mientras que en 1949, en el Metro 74 y Metro 75, cayó cinco veces seguidas.

Almirón, a pesar del flojo presente del equipo en el ámbito local, volverá a parar un once alternativo No jugará Valentín Barco, quien sufrió un corte en el pómulo ante Defensa, y en su lugar ingresará Ezequiel Bullaude. Además, jugará Merentiel como nueve de área acompañado en el ataque por Zeballos y Janson. Tampoco está en la lista de convocados Guillermo Pol Fernández, quien tiene una molestia muscular, y en su lugar ingresará Jorman Campuzano.
Por su parte, Omar De Felippe, técnico del Ferroviario que se está jugando la permanencia en Primera, decidió jugar de entrada con el mismo once inicial que derrotó 1-0 a Sarmiento en Junín.