La trayectoria del delantero de 28 años era seguida muy de cerca por los lugareños. Cada paso que daba Sala era acompañado por la gente que lo vio crecer. Cuando el último fin se semana se confirmó su pase a Cardiff hubo festejos en su nombre. Se sentían orgullosos de que un representante del pueblo iba a tener la oportunidad de jugar en la Premier League de Inglaterra, una de las mejores ligas del mundo.
En el club San Martín su nombre es ilustre. "Fueron años muy lindos", admitió Gudiño, directivo de la institución. En 2005, Sala fue una de las piezas fundamentales del subcampeonato que consiguió la reserva del equipo en la liga esperancina.
A tres cuadras de la cancha en la que Emiliano jugaba cuando era pequeño, en la iglesia Inmaculada Concepción, decenas de personas rezan desde el martes. Esperan que ocurra el milagro.