"Si cobraban ese penal para Boca, era un escándalo. Fue un penal finito, pero una vez que el árbitro cobra, para mí es penal", declaró Angelici, en defensa al supuesto favoritismo que las demás instituciones acusan de la Asociación del Fútbol Argentino por su club.
Consultado sobre su polémica reacción con los jugadores en el vestuario, el mandamás xeneize reconoció: "El viernes posterior a la derrota fui a Casa Amarilla para hablar porque estaba muy caliente. No creo haber dicho que este partido quedaría en la historia negra, pero sí en la historia".
Y agregó: "El único que habló aparte de mí fue Pablo Pérez. Dijo que se hacían responsables y que iban a revertir esto dentro de la cancha".
Por su parte, Angelici salió a bancar a Carlos Tevez, el principal apuntado por su floja actuación y por quien los hinchas esperaban que se cargue el equipo al hombro y comande una remontada en el estadio Malvinas Argentinas de Mendoza.
"Con Carlos tengo un aprecio personal, es un jugador extraordinario, de mucha categoría y que tiene partidos que juega bien, que participa, que ha hecho goles que nos han dado la victoria jugando en una posición que tal vez no es la de él, jugando de 9 de área, pero también con partidos donde por ahí no salen las cosas, pero como todos, y es totalmente injusto que solo se hable de él", deslizó.
"Se habla demasiado porque se piensa mal: Boca no necesita ser favorecido", cerró.
