Paraná En barrio La Floresta

Panadería social tiene un nuevo local y ampliará su producción con más personal

Se trata del emprendimiento gestado en Parroquia Guadalupe de La Floresta. “Gracias a Dios, con perseverancia y mucho trabajo, seguimos brindando un servicio”, ponderaron desde panadería social “San José” a Elonce.
La panadería social “San José” ya funciona en un nuevo local comercial en calle República de Siria 486 del barrio La Floresta de Paraná. El emprendimiento, que surgió en abril de 2019, tiene un doble objetivo: ofrecer un producto a un precio accesible a la comunidad y una alternativa laboral a jóvenes atravesados por diferentes problemáticas sociales.

“Inauguramos un nuevo local de venta y producción, los dos lugares vinculados en un solo salón”, anunció a Elonce el encargado administrativo de la panadería, Luis Walde, al mostrar “contento y orgulloso” por el nuevo paso del pro
El nuevo local comercial ayudará a expandir el emprendimiento. “Nos permitirá ampliar, no solo para la producción, sino también la cantidad de personas para el trabajo, lo que es sumamente importante porque la panadería es un oficio muy solicitado y una oferta de trabajo muy demandante”, evaluó Walde.

En la panadería social “San José” trabajan siete personas y apuntan, para fin de año, a que sean 12 personas; y para el año próximo, el proyecto planea emplear entre las 16 y 18 personas trabajando en horarios rotativos.

“En la escuela Los Nazarenos se brindan las capacitaciones en panadería y las prácticas se realizan en el local”, comentó al respecto.
En la oportunidad, anunció que la panadería incorporará el reparto propio a los diferentes kioscos aledaños que revenden sus productos. “Es un gran pasito que sumamos como servicio a la comunidad”, destacó.

La panadería ofrece pan, galleta, bizcochos, facturas, galletitas, alfajores de maicena, conitos de dulce de leche bañados en chocolate, pasta-frolas, tartas frutales y lemon pie. “Los precios son totalmente accesibles”, ponderó e informó que “el kilo de pan vale 240 pesos”.

Actualmente, el emprendimiento llegar a vender 100 kilos diarios de pan y galleta. “Tratamos de incrementar las ventas y achicar el costo de ganancia, siempre de la mano de que se pueda vender mucho más; también hay proveedores que colaboran con la iniciativa y nos dejan un pequeño precio diferenciado, lo que nos ayuda a brindar un precio más accesible a la comunidad”, explicó Walde.
Nacimos en 2019 y gracias a Dios, con perseverancia y mucho trabajo, seguimos brindando un servicio”, ponderó el encargado administrativo de la panadería.

“Trabajamos con chicos con diferentes problemáticas sociales, a quienes se les brinda capacitación y de acuerdo a los proyectos que visualicen o con los que quieran avanzar, algunos siguen con nosotros y otros comienzan con sus propios emprendimientos, como el trabajar en la casa o en otras panaderías o supermercados. Ya pasaron muchos chicos, algunos siguieron trabajando y otros, lamentablemente, han caído, pero es parte del ciclo de la vida y seguirnos avanzando con la panadería”, analizó Walde.
En la oportunidad, informó que “el Estado provincial nos ayudó en 2019 con un aporte para la compra de un horno y una sobadora, y después realizó distintos aportes durante el transcurso de la panadería”. (Elonce)
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