Sociedad Cata salió muy bien de la operación

Evoluciona favorablemente la nena entrerriana que recibió trasplante de corazón

El pasado martes, la niña de 11 años de Gualeguaychú fue sometida a una cirugía para tener su nuevo órgano vital. El parte médico da cuenta que todo salió bien y que evoluciona favorablemente.
Luego de la cirugía de trasplante de corazón a la cual se sometió Cata, la niña de 11 años de Gualeguaychú que estaba en la lista de espera del Incucai, se supo que todo el procedimiento se realizó con éxito y que su salud evoluciona de manera favorable.

Hasta el martes, habían sido días muy difíciles para la familia, que debió instalarse en Buenos Aires para que Cata reciba la mejor atención médica.

“Cata nació con una cardiopatía congénita, hipertrofia septal se llama. Al haber nacido con eso, lo tiene naturalizado y creció así, lo maneja muy bien, no puede realizar actividad física. Siempre tuvo el acompañamiento de todos sus compañeros en la escuela”, había explicado Andrea Peña, la madre de Catalina Ghiglia.

Tras la operación, la mujer pidió a la población “interiorizarse en el tema de la donación de órganos, me gustaría que cada familia en su casa pueda charlar del tema con sus pares, leer sobre la temática y pensar que una sola persona puede salvar más de siete vidas”, propuso, demostrando una enorme sensibilidad. “Se trata de pensar en ayudar al otro en un mundo tan individualista como es este”, dijo, por su parte, Pablo Alfaro, pediatra de la pequeña.

“Ahora, a partir de la Ley Justina, todos somos potenciales donantes hasta que se demuestra lo contrario. Lo que me interesa dejar bien claro es que nadie ni nada apura la muerte de un donante, que si bien puede resultar ilógico decirlo es un mito que todavía tiene lugar”, reconoció el médico.

“Otra idea que es absolutamente falsa y, en definitiva, dañina para la donación de órganos es la que sostiene que la extracción de órganos implicaría amputaciones sobre e cuerpo del donante. He tenido la posibilidad de estar en quirófano durante una procuración de órganos y el trabajo del equipo del Incucai-Instituto Nacional Central Único Coordinador de Ablación e Implante- es muy profesional. Los especialistas se encargan de cada detalle, se tiene muchísimo cuidado en este sentido”, sostuvo el médico pediatra. Y, en tercer término, aclaró otro de los mitos aún vigentes: “No es tan simple como ‘fui trasplantado, me salvé para siempre’. Los órganos o tejidos trasplantados pueden salvar vidas o la pueden prolongar en un tiempo considerable, en muchos casos. Esto depende, siempre, de cuál es la patología de base de quien recibe el trasplante y de cuál es el órgano o tejido trasplantado”. (El Día)
El comentario no será publicado ya que no encuadra dentro de las normas de participación de publicación preestablecidas.

NOTICIAS DESTACADAS