El jefe de Delitos Económicos, Javier González, precisó que "distintas personas habían invertido en la compra de terrenos en la zona de Oro Verde. Referían que los contratos de parte se habían celebrado allá por el 2015 mayormente, acordando en ese entonces valores aproximados de $300.000 por cada uno. Las adquisiciones se efectuaron con distintas modalidades de pago, pero lo cierto es que llegó el momento de escriturar o tomar posesión y se fueron encontrando con que habían sido víctimas de un presunto engaño económico: Los lotes fueron en reiteradas ocasiones vendidos a distintas personas, sin que ninguno llegue a poder incorporarlo a su patrimonio ni recuperar el dinero".
Producto de una investigación, Delitos Económicos individualizó a la persona que operó como vendedora, llegando a establecer que en los diferentes casos, apuntaban a esa misma identidad. Asimismo, se reunieron otros indicios y demás material registral, que propiciaron la confección de un informe elevado a la Fiscalía interviniente, que avaló un pedido de allanamiento y requisa domiciliaria efectuada por la repartición policial.
Fue así que este lunes una dotación de la División desembarcó en una finca ubicada a la vera de la Ruta Provincial Nº 11, en inmediaciones de Oro Verde, para dar cumplimiento a la medida librada. Al respecto, González indicó: "Se notificó a la moradora y tras ello se realizó una exhaustiva búsqueda, pudiendo hallarse en el interior de la finca una importante cantidad de documentación vinculada a la causa, la cual fue formalmente secuestrada y es elevada a la justicia, para que determine la eventual responsabilidad de la persona acusada".
La mujer implicada ya ha sido formalmente notificada y deberá próximamente asistir con un abogado defensor para la instancia de Indagatoria, tras lo cual se definirá su situación procesal.
La tipificación
Se trata de una tipificación penal poco usual. A modo de ilustración, Javier González explicó que "es un tipo de defraudación, en la que el vendedor silencia u oculta su calidad jurídica ante un determinado bien, induciendo a que quien compra se convierta en engañado, ya que no podrá efectivizar la adquisición ni concretar su incorporación al propio patrimonio. Es una la figura legal que tiene como objeto inmuebles posibles de vender, gravar o arrendar. Esas son las acciones que la ley reprime cuando se configura el delito".
Según destacó el funcionario en declaraciones a Fm Estación Plus, los compradores suelen descansarse en su buena fe, resultando satisfechos con la exhibición de algún instrumento que subordina su voluntad de adquirir. Ante ello, es importante remarcar la necesidad de verificar en forma personal la condición de los bienes registrables (vehículos o inmuebles) que serán objeto de una inversión, ya que obteniendo la información oficial de los respectivos Registros, se reducen las posibilidades de ser víctima del ardid.
