Estaban invitados los chicos de primer grado del Colegio Santa Rosa de Chivilcoy, en la provincia de Buenos Aires.
La mamá de Francesca había enviado las tarjetas y la maestra las había abrochado una por una en los cuadernos de comunicados de los niños, pero el día del festejo llegó y ninguno de ellos se presentó en el salón.
"Junto a su papá hicimos muchísimo esfuerzo para poder festejarle el cumple. Invitamos a bastante gente", relató Selena Ferreyra.Llegado el día de la fiesta, algunos invitados alegaron problemas de trabajo, otras enfermedades, y otras excusas varias, pero ninguno se presentó en el festejo. "Me dolió que ningún, absolutamente ningún compañerito de la escuela de Fran fue a su cumple. Ver que no llegaba ninguno de sus amiguitos me rompió el corazón", agregó Selena.
"No iba a hacer esto público pero realmente la bronca y angustia que tengo son muy grandes", añadió.
Después del triste fin de semana, Francesca no fue a clase el lunes, y su mamá pidió a la Dirección Escolar que la reubiquen en otra escuela donde no la discriminen. Fuente: (Víapaís).-