Además, el cuerpo presentaba "signos de abuso sexual de larga data" como así también golpes previos, huellas de cintazos, hematomas en la cabeza y hasta marcas compatibles con mordeduras. En tobillos y muñecas había marcas producidas por el uso de ataduras o precintos, revelaron a InfoCañuelas fuentes judiciales.
Se descartó que la niña haya fallecido por ahogamiento en la pileta Pelopincho de la vivienda, tal como dijo su madre cuando llegó a la Unidad Sanitaria de Máximo Paz con el cuerpito desvanecido y mojado. A causa de este bestial episodio, la madre de la menor, Viviana Beatriz Roldán, de 25 años, quedó detenida por homicidio calificado por el vínculo; en tanto que su concubino, Federico Sebastián Espinoza, de 23, quedó detenido por femicidio. Durante la tarde fueron llevados ante la fiscal Norma Pippo, titular de la UFIJ 2 de Cañuelas, pero se negaron a declarar.
Prestaron declaración testimonial el padre biológico de la nena, una tía y una vecina. Todos ellos coincidieron en relatar situaciones de violencia preexistente. La vecina, por ejemplo, contó que le pegaban con una manguera y que la dejaban sola en la casa junto a un bebito de la pareja, que ahora quedó al cuidado de un familiar.
El único que realizó una denuncia fue el papá de Bianca. Lo hizo en Monte Grande en una oportunidad en que la nena fue a visitarlo y advirtió que tenía moretones. Aunque todo quedó en una exposición policial. Viviana Roldán y su concubino Federico Sebastián Espinoza provienen de El Jagüel. Hace unos dos meses se instalaron en el llamado barrio Las Praderas o "barrio de los paraguayos", en Máximo Paz Oeste. Combate de Los Pozos 452 es la dirección de la vivienda donde ocurrió el inhumano desenlace.
Esta medianoche, Roldán fue conducida a la Unidad Sanitaria de Máximo Paz para realizar la evaluación médica previa a su reclusión. Cuando la entrevistaba un médico aseguró que se encuentra embarazada.
Por disposición de la fiscalía quedarán alojados en las comisarías de Lobos y Ranchos.