El juez de la causa, Gustavo Lleral, confirmó que "no hubo lesiones en el cuerpo que fue examinado por los peritos. Ahora falta determinar las causas de la muerte. Para eso hay que hacer estudios complementarios. Deberíamos esperar más de dos semanas. Tal vez tengamos algunos resultados con anticipación".
El magistrado aseguró que de las pruebas científicas participaron más de 55 personas en la sala, provenientes de todas las querellas, y que trabajando en total 150 personas. "Se determinó que la persona es Santiago Maldonado. Fue reconocido por sus familiares. Fue determinada su identidad por los rastros papilares que se obtuvieron". Por su parte, la abogada de la querella aclaró que los organismo de derechos humanos están "de acuerdo con cómo se celebró el proceso". "Tenemos que guardar silencio por orden del juez", dijo.
"Decir cualquier cosa sería aventurado, hasta ahora el trabajo ha sido correcto y no tenemos nada que objetar", agregó otro perito de la querella.
Antes de comenzar la autopsia, el juez Lleral tuvo dos reuniones con los abogados querellantes. En la primera les dijo que la autopsia iba a ser filmada con dos cámaras -una fija y otra móvil- y fotografiada y que ninguna de las personas que ingrese a la sala podría salir hasta su finalización. Tampoco se podían tener celulares en el recinto. Los estudios estuvieron a cargo de los integrantes del Cuerpo Médico Forense de la Corte Suprema de Justicia de la Nación y también participan especialistas del Equipo Argentino de Antropología Forense y peritos de la Prefectura Naval Argentina, de las querellas de la causa y del gendarme que está imputado en el expediente.