Las afectadas son dos mujeres de la ciudad de Córdoba, de los barrios Urca y San Rafael, con antecedentes de viaje al Caribe, según precisó Julio Cohen, director del hospital Rawson, donde fueron asistidas en forma ambulatoria, con evolución favorable.
"Los síntomas fueron leves: febrícula, sarpullido leve y algo de dolor articular y de cabeza", precisó, y anticipó: "El zika va a ser un problema serio este año, y este es el inicio".
Y es que la llegada de este virus a la provincia de la mano de los primeros casos importados de la segunda etapa del año se da en forma paralela con el dato de que hay presencia de larvas de Aedes aegypti en el 2,8 por ciento de los domicilios relevados en la ciudad de Córdoba a fines de septiembre.
Ese índice aédico implica que existe un moderado riesgo de brote de enfermedades transmitidas por el vector, de acuerdo con los parámetros de la Organización Mundial de la Salud (OMS).
"Esto significa que existe la posibilidad de que se produzcan casos autóctonos", advirtió Cohen.
"Tenemos los Aedes, y la transmisión del zika es fundamentalmente a través de la picadura de mosquitos, y, además, ya comienzan a llegar viajeros con el virus, es decir, casos importados a partir de los cuales se pueden producir casos autóctonos", señaló.
"Este año vamos a ver muchos casos de zika", consideró, y explicó que la población no tiene inmunidad contra la enfermedad ya que se trata de un virus nuevo.
"Además, en el 80 por ciento de los casos es asintomático, o sea que las personas no advierten que tienen la infección, pero igual transmiten el virus a través de las picaduras de mosquitos, por lo cual pueden dar origen a un foco autóctono", alertó Cohen. Y recordó que el virus también se transmite por vía sexual.
Por su parte, el titular de Medicina del Viajero de la Provincia, Ángel Mínguez, subrayó: "El índice aédico hallado y la detección de dos casos importados son una luz de alerta que marca que es imperioso reducir la cantidad de mosquitos vectores".
"Ahora es justamente cuando comienza la época en la que los Aedes aegypti comienzan a multiplicarse con las lluvias y el calor", señaló, y enfatizó la necesidad de que la población asuma la responsabilidad de eliminar los potenciales criaderos de las viviendas. "El Estado tiene que cumplir su rol, pero en cada hogar la responsabilidad es de los ciudadanos", enfatizó.
El zika desembarcó en las Américas en 2015, y ya está presente en todos los países de la región, con las únicas excepciones de Canadá, Chile y Uruguay.
"La mayor preocupación no es tanto la enfermedad en sí, ya que en general es leve, sino que puede generar complicaciones graves, en particular al feto durante el embarazo, como microcefalia y otras afectaciones neurológicas, y el síndrome de Guillain Barré en la población general", explicó.
No viajar a zonas con zika en ningún trimestre del embarazo; prevenir las picaduras de mosquitos en esos destinos; usar preservativo por seis meses después del regreso, y consultar sin demora si aparecen síntomas son las principales medidas de prevención. (La Voz del Interior)
