La pesquisa había arrojado un dato concreto: una organización criminal planeaba transportar grandes cantidades de droga desde la localidad correntina de Itatí hacia la ciudad de Corrientes.
Ante ello, autoridades del Ministerio de Seguridad ordenaron el despliegue de la fuerza en distintos puntos estratégicos. Entre ellos, un control vehicular sobre la Ruta Nacional N°12, clave para el éxito del procedimiento.
Uniformados apostados en vehículos particulares detectaron la salida de un Ford Mondeo a alta velocidad. El rodado cumplía con todas las características que habían surgido de las tareas de investigación.
A continuación, funcionarios emplazados en la localidad de Ramada Paso detectaron que el auto frenó su marcha en la banquina del corredor nacional. Inmediatamente apagó las luces. Siguiendo con el protocolo de actuación diseñado para estas circunstancias, se desplazó al personal de Gendarmería que aguardaba metros más adelante.
Cuando llegaron hasta el vehículo abandonado, comprobaron que su ocupante había escapado, aprovechando la lluvia intensa. El objetivo de la organización criminal era que un "puntero" se lo llevara y concretara la entrega de la mercadería.
El auto cargaba una gran cantidad de bolsas de nylon color negro. Eran 868 paquetes de marihuana, por un peso total de 696,163 kilos.
Por orden del magistrado interviniente se decomisó todo el estupefaciente y se intensificaron las tareas de investigación para dar con los miembros de la banda de narcotraficantes.
