La imagen muestra cómo un policía le enseña al nene a abrir los brazos para ser palpado en el acceso a la platea.
A raíz de esto, además, numerosos hinchas hicieron conocer su enojo hacia la policía por el "trato" de la fuerza en los ingresos con rigurosísimos controles y mucho celo. Y no hubo diferencias entre socios y no socios, publicó el diario Día a Día.