Sociedad La ejemplar historia de Marta

Tiene 15 hijos, sufre cáncer y lo que le preocupa es la educación de sus chicos

Tiene 41 años. Vive en un asentamiento en las afueras de Oberá. No se interna porque quiere estar con sus hijos. "Lo que más me preocupa es que no dejen de ir a la escuela, eso es lo que le pido a mi esposo todos los días", dijo.
Marta Carballo vive junto a su familia en la localidad de Oberá, a 100 kilómetros de Posadas, en un dramático entorno de humildad, necesidades y carencias. Marta tiene 41 años y padece una enfermedad terminal que le demanda cuidados intensivos. Tiene 15 hijos.

Nueve de sus 15 hijos son menores de edad y aún viven con ella y su esposo, Eduardo Fraga, de 54, que trabaja como vendedor ambulante y es el "sostén de la familia". Tuvo que haber una denuncia para que le presten atención.

Carballo fue diagnosticada hace unos meses con cáncer de útero, confirmaron fuentes del hospital Samic de Oberá, pero ella no baja los brazos. "Hace mucho tiempo venía sintiendo dolores, pero hace cinco meses se me agravó porque tengo mucha pérdida de líquido y tengo que usar pañales siempre", indicó.

"Me asistieron, vino un médico de Posadas de la parte de Salud, ahora va a ver si me tienen que internar pero yo no quiero dejar solos a mis hijos", afirmó.

Marta, que cobra una pensión que apenas le alcanza para sobrevivir, se mudó a la casa de su hermana junto a los cinco hijos más pequeños. Ella tiene cuatro hijos y vive en el mismo barrio, "Villa Gunther". "Ahora que estoy en la casa de mi hermana estoy un poco más tranquila", comentó.

Y dijo algo que es un ejemplo de entereza, responsabilidad, preocupación y amor: "Lo que más me preocupa es que mis hijos no dejen de ir a la escuela, eso es lo que le pido a mi esposo todos los días".

Los seis hijos mayores del matrimonio ya formaron familia. No viven con ella pero la visitan diariamente. Están muy acongojados por su enfermedad y por la situación de sus hermanitos, publica el sitio bigbangnews.

Ayuda
En la víspera se confirmó que la municipalidad de Oberá construyó una vivienda para Marta y su familia en el barrio de Villa Gunther, de modo adyacente a la de su hermana.
Además de la vivienda se les entregó bolsas con mercaderías y útiles escolares para los menores que están concurriendo a la escuela. Y se mencionó que en los próximos días se le entregarán camas y colchones. El caso de Marta Carballo pudo ser visibilizado a través de Adelina González, dirigente de Unión Popular, vía Misionescuatro y FM Oxígeno de Oberá. Durante semanas, Marta vivió de la solidaridad de los propios vecinos de Villa Gunther, una zona en la que residen varias familias en condiciones sumamente precarias.
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