Policiales Familias enfrentadas

Uno de los acusados por el crimen de Flores acordó 12 años de cárcel

Ramón Abasto, alias "Cuchara", quien ya se encuentra cumpliendo una pena en la Unidad Penal Nº 1, acordó en juicio abreviado 12 años y seis meses de prisión, se informó a Elonce TV. Es por el crimen de José Flores.
Comenzó el juicio por el crimen de José Flores, ocurrido en barrio La Milagrosa el 9 de agosto de 2014 El crimen sucedió en el contexto de un enfrentamiento de larga data entre las familias Abasto y Flores.

En ese marco, Ramón Abasto, alias "Cuchara", quien ya se encuentra cumpliendo una pena en la Unidad Penal Nº 1, acordó en juicio abreviado 12 años y seis meses de prisión. Según pudo saber Elonce TV, el mismo aceptó su participación en el hecho.

Mientras tanto, continuaba el juicio por el crimen al otro imputado. Alexander Abasto manifestó ante el Tribunal que él no estaba en el lugar del hecho, sino que se encontraba trabajando.
Y sostuvo que la familia Flores fue la responsable de la muerte de su padre.


El hecho
La imputación sostiene que el "9 de agosto de 2014, siendo aproximadamente las 15, en circunstancias en que José Carlos Flores se encontraba arribando al domicilio de su madre sito en el pasillo ubicado hacia el cardinal norte de la intersección de calles Santa María de Oro y Zavalía de Paraná, los imputados Ramón Alfredo Abasto, alias Cuchara , de 33 años, y un joven de 17 años, alias Cachete, quienes se encontraban frente al ex comedor comunitario por calle Zavalía, le efectuaron múltiples disparos con un arma de fuego, provocándole heridas de gravedad que requirieron su inmediato traslado al Hospital San Martín de esta ciudad, donde falleció a causa de los mismos, dándose posteriormente a la fuga".

El crimen de Flores reconoce una serie de violentos hechos ocurridos en el contexto de un enfrentamiento de larga data entre las familias Abasto y Flores. Según se conoció durante la investigación, "frente al domicilio sito en Zavalía 2.125, se hallaron tres vainas servidas calibre 22; sobre la misma calle, tras pasar un paredón emplazado perpendicularmente, se hallaron tres vainas servidas calibre 22; más hacia el oeste, siempre por la misma calle, se hallaron dos vainas servidas calibre 45; y sobre calle Santa María de Oro, al llegar al número 1.791, se localizan impactos de bala así como se halló un plomo deformado".
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