Por séptimo día consecutivo, un nutrido grupo de personas, que medios locales estimaron en más de 7.000, se concentró frente a la Casa de Gobierno de Tucumán, el mismo lugar donde el lunes pasado se produjo una brutal represión de la policía.
Los manifestantes reclamaban sin incidentes por transparencia en el proceso electoral y por la liberación de militantes detenidos durante la marcha que fuera reprimida.
En la manifestación había banderas de distintos sectores políticos, como el Partido Obrero, el Movimiento Socialista de los Trabajadores y el PRO. La prensa local señaló que la concurrencia era mayor a la de los últimos dos días. (DyN)