"En la familia, las cuestiones de compatibilidad se puede dar de manera más fácil. En el caso de la familiaridad, la ley busca que por detrás de una donación no haya nunca, una contraprestación económica", aseveró.
Asimismo, Sors se refirió a los casos en que una persona que no es familiar de quién necesita de este "gesto", puede hacerlo. "Se permite en casos en que un juez va a comprobar que no hay una cuestión económica detrás", indicó.
Reconoció que "ha habido casos en que no se ha aceptado, y esto ha ocurrido cuando el juez ha comprobado que no hay unión por lazos de afecto, que no se conocen desde hace muchos tiempo". Al mismo tiempo, explicó los casos de las donaciones cruzadas: "Si por ejemplo hay dos personas en lista de espera y dos familiares quieren donar, aunque no son compatibles con sus familiares, puede realizarse. Se la denomina cruzada por que se buscan las compatibilidades con otra pareja, en donde se da la compatibilidad. La justicia comprueba que no hay contraprestación", afirmó el responsable del Cucaier.
En vida se puede donar un riñón o una sección del hígado, esto en casos de un paciente pediátrico que recibe de una persona adulta.
"Generalmente a estas cosas las explican los equipos de trasplante. El proceso es largo, requiere de tratamientos médicos previos, hasta llegar a la indicación del trasplante. Se van barajando todas las posibilidades. Siempre se prefiere que el donante sea cadavérico, ya que la donación en vida no deja de tener sus riesgos. Por ejemplo, a una mujer joven que tenga pensado ser mamá, se le desaconseja la donación en vida, porque en el embarazo, cuando atraviese ese proceso va a necesitar todas sus fuerzas. Es decir, en cada caso particular se evalúa, algunas veces se aconseja y otras no". Elonce.com.