En la oportunidad, la profesional comentó que "la patología puede afectar a cualquier edad pero es más frecuente en la edad adulta después de los 40 años; a medida que avanzan en edad, hay más riesgos". "Hay que tener en cuenta los antecedentes familiares porque es una enfermedad hereditaria, además de patologías oculares, traumatismos y cirugías previas", recomendó Riera al tiempo que instó a realizarse un control anual después de los 40 años.
"A todo paciente que ingresa por un síntoma ocular, se le toma la presión porque es la única manera de detectarlo", reveló la oftalmóloga. Elonce.com